jueves, 29 de mayo de 2014

Ignorar al otro como una estrategia para utilizarlo



Humano usado como una batería en Matrix
Ignorar al otro es una estrategia dirigida a crear las condiciones que permita inhabilitarlo, utilizarlo y luego desecharlo, llegando incluso a eliminar el remordimiento como la típica señal de la mala conciencia.

Este mecanismo, sus causas y diferentes vertientes fueron abordados en el VII Congreso Argentino de Psicoanálisis


«Esta impersonalización que transforma al otro en una cosa es hoy una característica de nuestra sociedad» planteó el sicoanalista Alfredo Paincera en su conferencia.

¿Y qué es una cosa? Algo de los que nos servimos para satisfacer nuestras necesidades, sin la capacidad de pensar, ni sentir, ni actuar, como un celular, una batata o un condón. 

Estas conceptualizaciones me hicieron pensar en los dirigentes medios y de base enmarcados en los denominados equipos y corrientes, con dirigentes que tienden  hacer justo lo que se describe en el mencionado evento científico: cosifican a sus integrantes, es decir, son transformados en cosas, cuya situación particular, ideas y sentimientos realmente no importan. Son reducidos a una secuencia numérica en una lista que indica los votos con los que se pueden contar para una aspiración particular.

Painceira, el sicoanalista mencionado, matiza el asunto así: «Los vínculos entre las personas tienden a hacerse cada vez más instrumentales. El otro pierde su carácter de semejante para convertirse en cliente, rival o sencillamente en un instrumento para obtener algo» y trae a colación una advertencia de Juan Pablo II, «quien poco antes de morir dijo que el peor de los males de este tiempo es el de la inadvertencia».

Pero, ¿por qué reducir al otro a una nada? «El saber popular lo resume con la frase “La libertad de uno termina donde empieza la del otro”. La ecuación es sencilla: si el otro no existe, la libertad de uno se expande».

Pero los individuos que son víctimas de esta cruel estrategia de dominio no se quedan en la nada todo el tiempo a veces reaparecen: «En nuestra cultura cada vez es menos frecuente la relación yo-tú, y cada vez es más frecuente el contacto puramente del otro, que pasa a existir exclusivamente cuando es un obstáculo o cuando lo necesitamos.»

Muchos de los planteamientos vertidos en el mencionado congreso fueron recogidos en el artículo «Ignorar al otro, un signo de estos tiempos», publicado en  lanación.com.

El parecido con tantas situaciones actuales me ha llevado a reseñar esas ideas para compartirlas con los lectores de este medio.

No permitamos que nos cosifiquen, reclamemos nuestro derecho a existir, a ser tomados en cuenta como personas, no como instrumentos desechables.

Fuente: lanación

miércoles, 21 de mayo de 2014

Gonzalo Ramírez hace revelaciones conmovedoras en Facebook


Miguel Hidalgo, presidente de CI,
herido en centro de votación
El licenciado Gonzalo Ramírez hace conmovedoras revelaciones sobre los grandes riesgos en los que incurrieron los presidentes de Comité Intermedio y otros dirigentes peledeístas durante el último proceso electoral pasado.

También alude a los riesgos y sacrificios a los que se ven sometidas sus familias durante esos eventos.

Sus reflexiones parten de su fecha natalicia y de las elecciones presidenciales del día 20 de mayo del año 2012.


En aquellos tiempos el PRD trazó directrices a sus dirigentes zonales para que agredieran a los presidentes de Comités Intermedios del PLD (dirigentes locales) suscitando así un estado de temor en los votantes del partido oficialista, compuesto mayoritariamente  por mujeres, y de esa manera incrementar los niveles de abstención y finalmente dismuir la votación a favor de  Danilo Medina.

Los organismos de inteligencia del Estado captaron la información que, de alguna manera, llegó a los dirigentes medios del PLD que nos coordinaban, quienes a su vez la  informaron días previos al proceso.

Ellos nos prometieron blindarnos con protección discreta, pero no fue así. Nos dejaron como carne de cañón, una vez más. Y efectivamente los presidentes de Comités Intermedios fuimos agredidos a diestra y siniestra, sin ningún tipo de consecuencias, ni ante, ni durante, ni después.

A continuación copio la nota publicada por Gonzalo Ramírez en su cuenta de facebook, como un acto de identificación con sus apreciaciones y revelaciones y  como una manera de llamar la atención sobre la ignominia de algunos dirigentes que ven los empleos como moneda de compra de conciencia de aquellos a los que más bien se les debe por el trabajo sostenido, muchas veces arriesgando la propia vida en el campo de batalla, por cada triunfo del PLD. El texto de Gonzalo:
Gonzalo Ramírez presidene de CI del PLD

«Hoy cumplo mis primeros 44 años, recordando el 20 de mayo de 2012, víspera de mi cumpleaños No. 43 y día de las elecciones presidenciales, fue el día más intenso y peligroso de toda mi vida, tanto así, que durante todo ese día, al igual que miles de peledeistas en todo el país, estuve en peligro de perder la vida, por la defensa del triunfo del Partido de la Liberación Dominicana y del compañero Danilo Medina, ante el intento del PRD, de arrebatar el triunfo al PLD, a sangre, fuego, atraco y agresión a los peledeistas.

Ese inolvidable día, mientras muchos pseudopeledeistas estaban escondidos en lujosas oficinas, sabia y totalmente alejados del peligro, los presidentes de intermedios, los presidentes de comités de base y los miembros del PLD, estábamos estúpida y totalmente decididos a no ver la luz del día de mi cumpleaños No. 43, que era el día siguiente a las elecciones, 21 de mayo.

Gracias a Dios Todopoderoso, que se apiadó de mi familia - en la que confieso, no pensé ni un solo instante, al arriesgar mi vida de manera tan torpe y estúpida, pude cumplir mis 43.

Hoy, al arribar a mis 44 años, agradezco inmensamente a Dios Todopoderoso, por haberme protegido la vida, para bien de mi familia. ¿Qué habría sido de mi familia, en caso de que yo hubiese perdido la vida, en la defensa del triunfo de mi partido, ese inolvidable 20 de mayo? ¿Qué hubiese sido de mis tres hermosos hijos y de mi esposa? 

Pido perdón a mi esposa, a mis hijos y a mi familia, por no haber pensado en ellos, en la víspera de mis 43.
A mi Diosito Lindo, el creador del universo y de todo lo que en ellos hay, agradezco infinitamente, la constante protección que brinda a mi familia y a mí.»

Gracias Gonzalo por expresar con tanta brillantes una realidad tan contundente como invisible.


viernes, 16 de mayo de 2014

¿Domingo Jiménez ha «soltado su equipo en banda»?

Domingo Jimenez Alfonso Caraballo
Domingo Jiménez         Alfonso Caraballo
El martes 7 de noviembre del año 2006 el licenciado Danilo Medina comunicó al País su renuncia al cargo de Secretario de la Presidencia. Argumentó que su salida del gobierno le aportaría «libertad de pensamiento» entre otras cosas.

Poco tiempo después el licenciado José Cabrera celebraba una reunión donde comunicaba las líneas discursivas a implementarse en torno a la precandidatura de Medina.

En esa reunión yo informé que no me consideraba parte del equipo porque, específicamente el licenciado José Cabrera, de hecho me había excluido pues hacía tiempo que no me tomaba el teléfono, no me convocaba a las reuniones y no podía contar con él para resolver ningún tipo de problema.
Yo, usando mi «libertad de pensamiento», decidí apoyar la eventual candidatura de Leonel Fernández, aunque recientemente me habían cancelado del gobierno.

Fue entonces cuando empecé a tratar personalmente a Domingo Jiménez, él coordinaba el equipo de presidentes de Comité Intermedio y otros dirigentes que se identificaban con Leonel Fernández.

Aunque el doctor Jiménez es un viejo dirigente del PLD, en la circunscripción número 2 de Santo Domingo Este, su demarcación, se le objetaba motejándolo de «aéreo» y poco comprometido con las bases del lugar.

Él se vendió como un dirigente diferente, decía que no buscaba «borregos», que trabajaba en torno a «coincidencias», en contraposición abierta al estilo de trabajo basado en el acatamiento de «líneas», vocablo con el que se hace alusión a directrices trazadas desde arriba, de manera unilateral, acatadas abajo de manera servil, sin analizarlas, y muchas veces sin sintonizar con ellas.

Muchos compramos ese discurso, necesitábamos un liderazgo que respetara el don más preciado con el que puede contar un ser humano: el derecho a decidir usando su raciocinio, su sagrada «libertad de pensamiento».

Recuerdo que en aquella ocasión se me aproximó la ingeniera Alexandra Peña, cercana colaboradora de Domingo y me expresó su deseo de hablar conmigo. Puso tanta cautela, tanto tacto y misterio en su petición que llegué a pensar que se me iba a declarar, pero no, llegado el momento me formuló una pregunta: ¿Le gustaría trabajar con el doctor Domingo Jiménez? Le respondí que sí.

Conmigo ingresaron a dicho equipo: Víctor Sánchez, Ramón Betances, Juan González, Daniel Pérez, María Altagracia Mercedes Medina (Kati), Walkidia Medina Koreanne y muchos otros que ahora, de repente, no recuerdo.

Todos entramos a trabajar, a aportar ideas, liderazgo, legitimidad local, fondos, defensa, artículos periodísticos, etc.

Nosotros somos fundadores del Comité Intermedio Amín Abel Hasbun del barrio Puerto Rico de los Minas, competimos con los legendarios dirigentes Álvaro González y Leonte Ramírez, por la presidencia de dicho organismo y la ganamos en buena lid. Luego, fruto del trabajo intenso y constante ese intermedio se multiplicó, dando lugar al surgimiento de otro que pasó a ser presidido por la compañera María Gallard.

Dirigimos en nuestra área los procesos electorales del año 2000, 2002, 2004, 2006, 2008, 2010 y 2012 y sus correspondientes procesos internos, incluyendo el VIII Congreso Comandante Norge Botello.

Creemos que eso nos hace merecedores de un empleo en el Estado sin que tengamos que agradecerlo eternamente, de rodillas, como esclavos sin redención posible, tanto o más que Alexandra Peña, Raiza Herrera, Roberto Roche, Idiana, Victoria, Judith, Juvenilia Sosa, Emerson Vegazo…

De modo que nos se nos ha regalado nada. Hemos trabajado, arriesgando incluso la vida, por el PLD, tanto desde el gobierno como desde la oposición.

Cuento todo esto porque creo que la historia, de alguna extraña manera, se repite.

En el momento que escribo este artículo vivo, otra vez, la experiencia de la «excomunión» velada, dejada entrever, pero revelada por el patrón subyacente de llamadas no contestadas, solicitud de reuniones hecha  hace seis meses no respondidas, twiteos con zurrapa…

Hoy se me ha invitado a una reunión en la OFAC, la oficina comunitaria del Doctor, en la cual se repartirán boletas de una rifa para recaudar fondo, hoy volvemos a existir como por arte de magia…
 ¡Que cachaza!