Por Alfonso Caraballo
Ayer en la noche asistí al velatorio de un
amigo en la funeraria Blandino de la Sabana Larga. Se sabe que en un evento como
ese además de acompañar en el último adiós a los familiares del finado las
personas se reencuentran e intercambian opiniones del más variado tipo.
En la ocasión, en uno de esos acostumbrados apartes,
se pasó revista a la situación de las candidaturas de la circunscripción 2 de
Santo Domingo Este y cuando, ya al final, alguien mencionó el nombre de El Boli
se abrió otra ronda de opiniones.
La primera persona en hablar fue una compañera
de Los Tres Brazos.
— «Miren compañeros, ese señor nunca ha sido visto
en ningún tipo de trabajo político o comunitario en los Tres Brazos, no es
verdad que habiendo tantos compañeros que han dado su vida por el PLD vamos a
venir a apoyar a un forastero dizque porque es famoso en los medios, no señor».
Otro compañero con aires intelectuales apuntaló:
«además Juan Bosch lo dijo, “zapatero a tus zapatos”. Si usted lo que sabe es
hacer chistes, ¿a qué va al Congreso? que se quede haciendo chistes o perderá su
tiempo, su dinero y una parte de sus seguidores. Da pena pensar en los
esfuerzos que hizo Bosch educando a la militancia del PLD para que ahora nos
represente un cómico».
— El Boli de entrada, está demostrando muy poca
seriedad. Hace pocos días el puso una encuesta en Facebook midiéndose con
Danilo Mesa y cuando vio que Mesa lo aventajaba en la votación la quitó antes
de tiempo y la puso en Instagram, una red donde él es más fuerte y pensó que
podía llevar alguna ventaja, y cuando se percató de que allí también Danilo
Mesa le ganaba, la quitó inmediatamente. Aportó otro compañero.
Una compañera que permanecía callada puso el
punto final a ese capítulo: «A él me lo llevaron a mi casa. Yo le dije que estaba
apoyando a la compañera Alexandra Peña ya que ella es muy trabajadora, que representa
a Leonel Fernández y que ya era hora de que el líder del Partido tuviera un
representante fiel en el Congreso de esta circunscripción».
«Esta circunscripción tiene que respetarse o
nunca la respetaran», finalizó.
Yo por mi parte opino que llevando improvisados
sin desarrollo político a estamentos tan importantes como El Congreso de la República,
tan solo por el supuesto caudal de votos que se puedan captar, banaliza la
política, le resta calidad a su accionar y aleja a los partidos de unos de sus
roles fundamentales, ese en el que puso tanto empeño el profesor Juan Bosch, la
formación ética y humanística de la militancia, como el camino verdadero para tener
un mejor partido, un mejor Estado y sobre todo, un mejor país.
Eso con simples cómicos no se consigue.
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